América
Amor a la argentina
En los últimos años, por aglomeración de nombres rutilantes y calidad futbolística, la liga mexicana se convirtió en un certamen a tener en cuenta a la de hora de alegrarse por la dinámica y versiones ofensivas. Después se analizará si se juega bien o no, si tácticamente son ordenados o no, o simplemente si tiene la jerarquía suficiente para colocarla entre las más importantes del continente americano. Más allá de esto, México se transformó en uno de los destinos predilectos para los argentinos, que encuentran en suelo azteca un escenario ideal para mostrar su potencial. La forma de cómo se vive el fútbol, las características más abiertas y las facilidades del jugador para adaptarse, hacen un escenario ideal.
El número de representantes nacionales aumenta año tras año, y el 2019 no es una excepción. Durante el mercado de pases, el cual no finalizó, cuatro futbolistas tendrán su debut: Emanuel Gigliotti y Maximiliano Meza abandonaron Independiente para reforzar Toluca y Monterrey respectivamente, mientras que Necaxa sumó a Fernando Meza, producto de la cantera de San Lorenzo y de último paso por Colo Colo. Javier Correa completa el cuarteto y Santos Laguna será el club que lo albergue en su aventura.
Si comenzamos a desmenuzar la nomina, el América de Miguel Herrera cuenta con Agustín Marchesín y Guido Rodríguez, pilares fundamentales en la obtención del título tras cuatro años de sequía. El arquero fue el segundo con la valla menos vencida durante el Apertura 2018, mientras que el volante surgido en River fue premiado como el Mejor Jugador del campeonato. Cristian Insaurralde también forma parte del plantel, aunque el nacionalizado paraguayo es más una rueda de auxilio que una fija en el once titular. Los elencos que cuentan con más argentinos son Monterrey y Toluca. El primero, que desembolsó 15 millones de dólares por Meza, cuenta con Marcelo Barovero, Nicolás Sánchez, Rogelio Funes Mori, Leonel Vangioni y José Basanta, el capitán de Diego Alonso. Cabe destacar que Juan Pablo Carrizo partió rumbo a Paraguay, para alistarse en Cerro Porteño.
Además del Puma Gigliotti, que llega con el cartel de ser el goleador de la Superliga, los «Diablos Rojos» tienen en su plantilla a Fernando Tobio, Santiago García, Enrique Triverio, Pablo Barrientos y Alexis Canelo. Quien aparece en el «segundo puesto» es Tijuana, con cinco. Julían Velázquez, Diego González, Juan Manuel Lucero, Diego Braghieri y Gustavo Canto son los encargados de mantener en pie a la legión en la institución que se ha relacionado recientemente a Cristian Bragarnik. Es una realidad que el vínculo con el empresario hace que Xolos cuente con varios argentinos. Incluso, durante el segundo semestre del 2017, fueron diez los albicelestes bajo la tutela de Eduardo Coudet. El que sigue en el repertorio es Pachuca, que durante el receso sumó a Ismael Sosa y Nahuel Bustos, para anexarlos con sus compatriotas Franco Jara y Leonardo Ulloa. El primero se despidió de Tigres, mientras que el volante llegó desde Talleres de Córdoba, gracias al nexo Andres Fassi y Grupo Pachuca. Justamente, por esta sociedad deportiva, Sebastían Palacios dejó a los Tuzos y pegó la vuelta a la T.
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Necaxa y Santos Laguna cuentan con un trío de actores argentinos. Los de Aguascalientes tienen a Brian Fernández, Claudio Riaño y el mencionado Fernando Meza, y Laguneros al incorporado Javier Correa, Martín Nervo y Julio Furch, que con doce gritos fue el máximo artillero argentino, solo por debajo de los catorce que marcó André-Pierre Gignac. Más allá de que el pampeano fue el romperredes, además de sumar cinco asistencias, quien terminó con mejor porcentaje de gol fue Leonardo Ramos, que en los Lobos de BUAP anotó ocho tantos en nueve partidos, lo que representó un 0,89 de efectividad. Curiosamente, «La Manada» solo cuenta con el ex Nueva Chicago, El Porvenir, Lamadrid, entre otros. Otro elenco que solo tiene un exponente argento es Pumas, que con la salida de Matías Alustiza a Puebla dejó huérfano a Ignacio Malcorra. Hablando de Alustiza, que retorna para cumplir su tercer ciclo, tendrá como ladero al desconocido Pablo Gómez, un mendocino que es considerado una de las joyitas de las fuerzas básicas de «La Franja».
León puede entrar en la lista de un exponente o sumarse a los que cuentan con dos albicelestes. Las Esmeraladas se reforzaron con Rubens Sambueza, que lleva una década de experiencia en la liga, y posiblemente con Gustavo Bou. La Pantera rescindió su contrato con Racing y Tijuana mostró predisposición para jerarquizar el plantel de Ignacio Ambriz. De llegar, el entrerriano tendrá la difícil labor de hacer olvidar a Mauro Boselli, el segundo artillero histórico de los de Guanajuato, que armó las valijas para sumarse a las filas del Corinthians. Atlas, Querétaro, Morelia, Tigres, Veracruz y Cruz Azul cierran la lista con dos players cada uno. Los Zorros tienen la esperanza de que Nicolás Pareja y Ricardo Álvarez se recuperen de sus lesiones y mejorar la versión del campeonato pasado, donde finalizaron en la anteúltima posición, con solo once goles a favor, siendo el equipo con menos cantidad de tantos convertidos. Por su parte, Rafael Puente del Río tiene en las filas de «los gallos blancos» a Diego Novaretti y Daniel Villalva. Emanuel Loeschbor y Gastón Lezcano son los argentinos de los Monarcas de Morelia. En cuanto a Tigres, que tiene el presupuesto más alto de México, cuenta con Lucas Zelarayán y el mundialista Nahuel Guzmán. En los «Tiburones Rojos», que acabó el 2018 como colista, Guido Millán y Cristian Menéndez son los que llevan la bandera celeste y blanca. Para cerrar, en los Cementeros están Milton Caraglio e Iván Marcone, otro de los puntos más altos del último semestre.
Los 45 exponentes (dando por hecho el vínculo de Bou con León) podrían ser más si se confirma la llegada de Alan Franco, el gran anhelo de Tigres, que tiene como obstáculo la cláusula de 20 millones de dólares. Pero además de las marchas de Carrizo, Boselli y Palacios, también se dieron las salidas de Maximiliano Cerato al Everton chileno, Walter Montoya -sin pena ni gloria- de Cruz Azul hacia Gremio de Brasil, y el caso de Rodrigo Noya, que el torneo pasado jugó en Veracruz y que para este semestre defenderá la camiseta del Alebrijes de Oaxaca del ascenso, lo cual tiene su contrapunto en el número final. El caso de Christian Giménez es la frutilla del postre. El Chaco se retiró después de casi veinte años como profesional, de los cuales pasó casi quince años en territorio azteca. Abordó en la segunda parte del 2004 para jugar un año en Veracruz y luego vistió las camisetas de América, Cruz Azul y Pachuca, donde colgó las botas y tuvo el placer de compartir campo de juego con su hijo.
Puede decirse que el fútbol mexicano fue la vidriera para muchos jugadores argentinos. Es más, casos como el de Giménez, Alfredo Moreno o Emanuel Villa, muestran que es su hogar futbolístico. Por estos, y varios ejemplos más, en México podrían cambiar el hit de Thalia a «amor a la argentina».
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- AUTOR
- Claudio González
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